UNA HISTORIA DE VIOLENCIA

(A History of Violence, Canadá-Estados Unidos, 2005)

Dirección. David Cronenberg/ Guión. Josh Olson, inspirado en la historieta gráfica de John Wagner y Vince Locke/ Fotografía en color. Peter Suschitzky/ Música: Howard Shore/ Edición: Ronald Sanders/ Dirección de arte: James McAteer/ Diseño de Producción. Carol Spier/ Vestuario. Denise Cronenberg/ Producción. Chris Bender, J.C. Spink y David Cronenberg/ Con: Viggo Mortensen (Tom Stall), Maria Bello (Edie Stall) William Hurt (Richie Cusack), Ed Harris (Carl Fogarty), Ashton Holmes (Jack Stall), Heidi Hayes (Sarah Stall), Peter McNeill (alguacil Sam Carney), Kyle Schmid (Bobby), Greg Bryck (Billy) Sumela Kay (Judy Denvers)

Duración. 96 mins.

 

SINOPSIS

Tom Stall lleva una vida feliz y tranquila con su mujer abogada, Edie Stall y sus dos hijos Jack y Sarah en la pequeña ciudad de Millbrook, Indiana, hasta que una noche su existencia idílica se ve destrozada cuando frustra un violento intento de robo en su restaurante. Tom percibe el peligro y salva a sus clientes y amigos matando en defensa propia a dos criminales buscados por la justicia.

Aplaudido como héroe local, la vida de Tom cambia de la noche a la mañana y de repente se encuentra convertido en el centro de atención de todos los medios de comunicación. Incómodo con esta fama no buscada, intenta volver a su vida normal, pero un hombre amenazante y misterioso Carl Fogarty, llega a la ciudad para enfrentarse a él porque cree que Tom es el hombre con quien tiene una cuenta pendiente del pasado. Mientras Tom y su familia luchan contra este error de identificación e intentan afrontar la transformación de sus vidas, se verán obligados a plantear sus relaciones y los temas que los dividen.

 

 

Una historia de violencia fue nominada al Oscar por Mejor Guión adaptado y Actor de Reparto (William Hurt). Obtuvo el premio de la película del año en los AFI Award y el de Mejor Director en los Bodil Award. Mejor Director y Mejor Actriz por la Asociación de Críticos de Nueva York, Los Ángeles, Kansas, San Diego, Ohio, Utah, Chicago y Toronto en Canadá. Asimismo fue ganadora de los galardones a Mejor Director, Edición y Diseño de sonido por la Asociación de Directores de Canadá. Mejor Película Extranjera por la Sociedad de Críticos de Francia 

 

 

En relación a la violencia en la película, Cronenberg comentó que “buscaba una violencia verdadera y brutal. Se trata de una brutalidad real y del tipo de violencia que verías en una pelea callejera, por ejemplo. Algo bastante tosco, muy sangriento y nada bonito, lo contrario a las elaboradas y elegantes secuencias con coreografía que vemos en otras películas»… -Lahiguera.com-

 

Nacido en Toronto en 1943, Cronenberg se forma en la literatura fantástica y la biología, dos disciplinas aparentemente opuestas que darán pie a una de las obras más sugestivas dentro del cine de horror contemporáneo. Obsesiones de un realizador que llevará a terrenos inimaginables la ruptura del interior, la discordia entre mente y cuerpo, cerebro y carne como detonador de un poder maligno que surge del interior del cuerpo mismo. No por algo, su primer largometraje -sobre una invasión de sanguijuelas que se propagan por contacto bucal- lleva el título de They Came From Within/Parásitos asesinos.

     Cintas como Rabia, Telépatas, mentes destructoras, La mosca, o Engendros del diablo, se conectan de alguna manera con su obra más reciente: Dead Ringers, El almuerzo desnudo, Crash, eXistenZ, Spider, Una historia de violencia, Promesas del Este y otras…En todas ellas, se sumerge en terrenos del horror sicológico y la brutalidad intrínseca del hombre, sin que varíe su universo personal, escatológico y sexualmente malsano donde continúa explorando los misterios del organismo típicos en su filmografía…

 

Desde la primera escena de Una historia de violencia, se anticipa ya la intromisión de lo siniestro dentro de lo cotidiano. En los primeros minutos, el canadiense David Cronenberg introduce un elemento extraño, casi onírico: el agotamiento mental y el hecho de mover el automóvil unos cuantos metros, por parte de un par de asesinos, que no se detienen ni siquiera ante la presencia de una niña, para ejecutar sus planes. Esa suerte de maldad y violencia inherente, contrasta con la familia feliz que integra Tom Stall, dueño de una cafetería, su atractiva esposa Edie, Jack, su hijo adolescente y la pequeña Sarah, instalados en una plácida comunidad de Indiana.

 

«Tiene mucha fuerza emocional…Trata de una pareja con dos hijos que intentan llevar una vida honesta y las dificultades que encuentran para hacerlo. Me cautivó ese elemento clásico…Viggo es mi tipo de actor: en primer lugar porque esta clase de actor no tiene miedo ya que no intenta proteger la imagen que tiene de sí mismo como protagonista tradicional. Esto le da una paleta mucho más variada con la que pintar y puede añadir muchos más matices. Necesitaba la excentricidad, que es más típica de un actor secundario, pero a la vez la presencia y el carisma del protagonista» –David Cronenberg, La higuera.com-

 

Con ecos de filmes que van de El desconocido Shane (George Stevens, 1953) a Perros de paja (Sam Peckinpah, 1971), Cronenberg y su guionista Josh Olson, consiguen una inquietante radiografía del sueño americano y una revisión de la familia estadunidense: sus contradicciones y su herencia de sangre. Se sumergen en una América profunda luminosa y recorren hábilmente, los mismos terrenos de David Lynch y del más intrincado cine negro clásico como: La senda tenebrosa (Delmer Daves, 1947)y Traidora y mortal (Jacques Tourner, 1947): cómo en ésta, la violencia regresa desde un pasado urbano, para contaminar el presente, invadiendo el idílico entorno rural.

        Y es que, al cineasta canadiense, le gusta explorar el lado salvaje del individuo…“Los monstruos no existen”, le dice Tom a su asustada hija que despierta en medio de la noche. No obstante,  la pesadilla se apodera de la realidad, con la llegada de los dos maleantes del inicio. El pacífico padre de familia los enfrenta con la misma violencia y se trastoca en el héroe local, aclamado por vecinos y los medios: “Hice lo que cualquiera hubiera hecho”; sin embargo, ello provoca la llegada de extraños hombres –Ed Harris sensacional- que reclaman el pasado, donde Tom es Joey Richie, un hombre cuya facilidad para matar, es asombrosa. La violencia se corta con violencia: con disparos o con golpes, en el jardín de la casa, o en los pasillos de la escuela del hijo humillado constantemente.

       Los monstruos sí existen: se ocultan entre las sombras, dispuestos a saltar al ser invocados. Una historia de violencia marcó en el nuevo milenio, el regreso de un gran cineasta como Cronenberg, con una pequeña joya, en la que el realizador, reinventa y goza, con las convenciones del thriller, el western, o el melodrama familiar, en un intrigante juego de apariencias, donde, la perdida de la inocencia y la capacidad animal: en lo sexual y en lo violento, es lo único que nos define y nos confronta…

«Me gusta su forma de contar las historias. No sólo es completamente original en su modo de entretener a los espectadores con un drama psicológico sino que lleva al público a plantearse preguntas difíciles sobre la naturaleza de la violencia y la identidad». –Viggo Mortensen. La higuera.com-

 

RAFAEL AVIÑA

Centro Histórico de la Ciudad de México, 15 octubre 2021